jueves, 3 de junio de 2010

Sin REMITENTE ni DESTINATARIO.

Una vez imagine una vida juntos, en al cual nos admirábamos y era posible ser parte de tus sueños, dónde sujetabas mi cara entre tus manos extendidas y me mirabas con ojos de niña ilusionados mientras suavemente la movías de un lado al otro; dónde me cantabas en voz baja al oído “Y cambiaste mi vida mi ritmo mi espacio...” y era así… me sentía en la cima y amarte era la cosa más fácil de hacer en este mundo.



Los que aman no duermen, viven en un onírico mundo donde los sueños cobran realidad y sonríen despiertos, pero también lloran desgracias inventadas y en el paroxismo de su sueño en vida sucumben muertos con el pecho rebosante de corazón ante la galopante idea de que nada existe, que todo, en efecto, fue sólo un sueño.



Me sentía a salvo de mí, de todo. Hemos caminado y cambiado tanto que si volteo atrás cuesta trabajo ver el principio de todo esto, sin embargo los recuerdos perduran para siempre y los recuerdos de cómo iniciamos este viaje siguen siendo tan nítidos en mi cabeza que no es necesario voltear, sólo cierro los ojos y nos veo sentados en algún lugar lejos de todo contando las estrellas que llegaban hasta nuestros pies, enamorados, juntos, desnudos, amigos, amantes!…jugando a ver quien era capaz de amar más al otro, nunca supe quien ganó, creo que hasta entonces ambos ganámos siempre, nunca supe cuando dejamos de jugar.



"Por qué no estoy soñando, por qué este dolor no es ficticio, porque sigo aquí, sentado a la mitad del infierno y la nada, vomitando tu nombre y tus palabras, tu ira, tu odio. Por qué no es esto una fantasía, una mala jugada de la mente, una turbia ficción cruel y demente y no una realidad destructora."



Después abro mis ojos pero no estas aquí, no siento tus manos ni reconozco tu olor, sólo queda el olor a tabaco y uno de los días más fríos que pueda recordar, ecos de improperios, heridas que supuran rencor…no queda nada o al menos eso parece.



"Por qué quiero gritar y no puedo, porque siento que me ahogo, por qué no puedo contenerlo, por qué no puedo contenerte, por qué tiene que ser así, por qué tengo este vacío, por qué no haces nada por remediarlo, por qué no dejo de preguntar por qué y trato de hacer algo, por qué tiene que ser mi culpa, por qué tiene que ser así, por qué me siento tan cansado, por qué no quiero decirte nada, por qué quiero llorar y esconderme de ti, por qué no puedo mas que amarte,…"



Qué ocurrió? Qué nos paso? Qué hice? Vinieron las dudas, el miedo y la mentira, los desencuentros se hicieron algo cotidiano, a priori motivados por esa constante competencia dónde ganaba quien no ganaba nada tratando de que al final siempre su voz fuese la última, las reservas, creímos poder ver dónde terminaba el sendero y entonces comenzamos a preparamos para lo que nunca se esta listo, el final. La desconfianza mancillo el cariño, me humillaste con tu desprecio y tus gritos, desconfiaste de mi…entonces supe que nunca deje de estar sólo, y así sólo ya sin ti después de mucho tiempo me traicione buscando sacar tu voz de mi cabeza tu corazón de mi pecho. Pasaron los días…volvimos y volvi a buscar lo que no podia apreciar más en ti. Jamás me habia equivocado tanto, jamas un error me habia valido todo!!!. Te engañaste pensando que me diste algo que no conoces -el perdón-… y te empeñaste en regresar con regularidad al momento dónde perdí tu respeto. Mi culpa y la suspicacia finalmente vencieron…el hedor de tu odio, un par de pateticos retratos, miles de fotos y algunas flores marchitas es todo lo que queda.



...el vacío y la ausencia nunca llegan cuando estas vestido para ellos, sino hasta que te encuentras ya desnudo... Justo como debería de ser.



Y sin embargo con solo mover un dedo estaría ahí para ti.



No hay comentarios:

Publicar un comentario